lunes, octubre 27

me deconstruí

Ai aia ais
Ia ia ia aia ui
Tralalí
Lali lalá
Aruaru
urulario
Lalilá
Rimbibolam lam lam
Uiaya zollonario
lalilá
Monlutrella monluztrella
lalolú
Montresol y mandotrina
Ai ai
Montesur en lasurido
Montesol
Susponsedo solinario
Aururaro ulisamento lalilá
Ylarca murllonía
Hormajauma marijauda
Mitradente
Mitrapausa
Mitralonga
Matrisola
matriola
Olamina olasica lalilá
Isonauta
Olandera uruaro
Ia ia campanuso compasedo
Tralalá
Ai ai mareciente eternauta
Redontella tallerendo lucenario
la ia
Laribamba
Larimbambamplanerella
Laribambamositerella
Leiramombaririlanla
lirilam
Ai i a
Temporía
Ai ai aia
Ululayu
lulayu
layu yu
Ululayu
ulayu
ayu yu
Lunatando
Sensorida e infimento
Ululado ululamento
Plegasuena
Cantasorio ululaciente
Oraneva yu yu yo
Tempovío
Infilero e infinauta zurrosía
Jaurinario ururayúMontañendo oraranía
Aurorasía ululacente
Semperiva
ivarisa tarirá
Campanudio lalalí
Auriciento auronida
Lalalí
Io ia
i i i o
Ai a i ai a i i i i o ia

(Canto VII de Altazor)

[y así se calmó la tormenta de filosofías que pretendía ahogarme me salvé por un pelo estaba al borde del rallado de papa de repente paf nada silencio descanso shut down ese lastroso cerebelo

vacío]

"cuando los indios del norte se encontraban aproblemados se recomendaban y hacian una meditacion q se llama "subir la montaña"
eso quiere decir q literalmente subian a un punto donde pudieran ver su campamento o aldea desde arriba
con distancia observaban que su mundo es un punto en un magico universo y se ven a ellos tambien interactuando ahi en ese pequeño espacio pero con repercucion cosmica..."


[gracias vero]

domingo, octubre 26

capítulo 82

Morelliana.
¿Por qué escribo esto? No tengo ideas claras, ni siquiera tengo ideas. Hay jirones, impulsos, bloques, y todo busca una forma, entonces entra en juego el ritmo y yo escribo dentro de ese ritmo, escribo por él, movido por él y no por eso que llaman el pensamiento y que hace la prosa, literaria u otra. Hay primero una situación confusa, que sólo puede definirse en la palabra; de esa penumbra parto, y si lo que quiero decir (si lo que quiere decirse) tiene suficiente fuerza, inmediatamente se inicia el swing, un balanceo rítmico que me saca a la superficie, lo ilumina todo, conjuga esa materia confusa y el que la padece en una tercera instancia clara y como fatal: la frase, el párrafo, la página, el capítulo, el libro. Ese balanceo, ese swing en el que se va informando la materia confusa, es para mí la única certidumbre de su necesidad, porque apenas cesa comprendo que no tengo ya nada que decir. Y también es la única recompensa de mi trabajo: sentir que lo que he escrito es como un lomo de gato bajo la caricia, con chispas y un arquearse cadencioso. Así por la escritura bajo al volcán, me acerco a las Madres, me conecto con el Centro -sea lo que sea. Escribir es dibujar mi mandala y a la vez recorrerlo, inventar una purificación purificándose; tarea de pobre shamán blanco con calzoncillos de nylon
.


Julio Cortázar

sábado, octubre 25

el otro vacío



Un vacío, pero ojalá fuera un vacío místico, el tao, el zen, la luz. En cambio, se trata de la pesadez, la banalidad, el cansancio.
Qué sentido tiene compartir sin compartir? Se hace más difícil levantar los pies a medida que avanza el carrete:

“Toca guitarra, esta y esta otra, rómpete los dedos que queremos cantar”...yo quiero cantar y no puedo, no me sale el canto, no me siento bien, no estoy aquí pero sí, aunque dentro de mis adentros, ermitaño sin remedio.

Por qué no me llena ser parte de las caras, ser un cuerpo más en la corriente?
Que acaso soy un ser muy exigente, intolerante, buscador de una espiritualidad difícil de encontrar?
Por qué no puedo hacer amigos como pan caliente hacen los panaderos fríos?

Por qué!?

Por qué escribo en la noche en vez de dormir?
Soy un anciano, nací envejecido por las hojarascas que me cegaron en la calle, en el colegio, en la vida...camino como un par de pies sin piernas, sin tórax, sin manos, sin cabeza, sólo pies caminantes e incomprendidos. Incomprensibles, sí, descabezados, acéfalos, tristes.

"La soledad implica tristeza?
-mmmmm es que es como anormal o no?"

muera la normalidad!
muera yo!

y renazca
otra vez,
de las c e n i z a s.

Mi recuerdo más antiguo siempre es la ceniza, de ahí vengo y vendré y volveré, y caeré y me levantaré. De las cenizas moriré y naceré y moriré y naceré.
De las cenizas, desde esa parte evitada, ahora rodeada, gritaré hacia mis adentros el amor del mundo, el mundo que se aprende a ver solo, en el silencio del axolotl, a pesar de antes haber sido [o intentado ser] un hombre.

lunes, octubre 20

flujo de consciencia


tresdieciseis el montijo peñalolén cubierto de paradero espero ahora la misma espera que ahoga palabras y vigilias tal y como esa vez capitalina y gris ya no existe ese armatoste amarillo y yo tengo papelillos pero todo está escaso cuando llueve se terminó la ahumada envoltura de mis tardes cerebrales por lo menos el aire traerá orden aunque la tormenta volverá y la paz y la guerra y el hambre y la ignorancia y los aserruchamientos nunca acabarán aprenderé a caminar en el ojo de la tormenta

viernes, octubre 10

La aparición del día [ensayo de poema]

Veo el primer rayo de luz y es negro
ilumina las ciudades y sus carreteras llenas de movimientos
y a todas las lenguas que han sobrevivido

a lo idéntico que son azar y albedrío
El amanecer deja de ser una enfermedad
porque si bien las estrellas desaparecen

nuevas constelaciones se han alzado en el firmamento
para acompañar a ese hombre esa mujer
ese niño esa anciana que están en este preciso instante

en la más abismal de las soledades acostándose
pensando que nadie volverá a recordarlos
pero un nuevo día aparece y junto a él

nuevos ojos nuevas manos nuevas lenguas
que convertirán el cielo en una nueva tierra
donde sembrar las también nuevas palabras que triunfaron

ya que el milagro de la vida está en un árbol
escondido en lo más profundo de la ficción
que se alimenta de la luz del Sol Negro

para no olvidar el sueño de la noche anterior
que son todos los sueños de todas las noches
de todos quienes han contemplado una noche estrellada

y han visto en ella ese árbol que es también
una pequeña casa donde vive alguien que nunca existió
ni tampoco sus ruidos ni sus monstruos ni sus libros

que son los Libros de la Vida que nadie ha leído jamás
y en donde está escrito el poema que no se ha escrito
por eso permanecerán por siempre

y yo no lo podré ver con mis propios ojos
porque ya todo me resultará ajeno
Quizá esto sea lo último que pueda escribir

y de ser así vuelvo a la noche originaria bajo la cual
alguien tomó un poco de barro e inventó la escritura
Veo como todo se derrumba a mi alrededor

desde mi cuerpo hasta los cuerpos celestes
rumoreando sobre los destinos
de los que vendrán el día de mañana

Yo todo esto lo soñé como si hubiese estado muerto
devorado por las luciérnagas
que son los Gusanos de la Iluminación

pero no fue así
lamentablemente
no fue así

-Héctor Hernández Montecinos

jueves, octubre 9


Veía al otro como algo estático y era porque yo mismo me amparaba en esa falta de movimiento, en la seguridad de lo conocido. Pero exploté, no era posible vivir de esa forma, el espejo terminó reflejando lo de adentro, lo cambiante. Fue así que observé lo eterno de lo efímero, la permanente impermanencia de un respirar solar, de un latido del corazón. Todo lo mismo de todo, el mandala, la rayuela. Y si no hay comienzo ¿cómo podría haber final? Por eso es lo mismo todo, por eso el reflejo, por eso el movimiento.